A mediados de febrero, los trabajadores de reparación de neumáticos Ozimar Queiroz y Lindomar Queiroz se sorprendieron cuando llegaron temprano al trabajo en el taller de reparación de neumáticos ubicado en Estrada do Belmont, Zona Norte de Porto Velho. Esto fue debido a un perro abandonado al costado del camino. La criatura dócil estaba delgada, con las patas abiertas y no podía caminar.

Cuando Ozimar, también conocido como Galego, se enteró de la situación del perro, decidió cuidar de él hasta poder encontrar una familia que lo adoptara. Sin embargo, han pasado 20 días y el perro aún no tiene un hogar permanente.

“Lo tiraron frente al taller. Llegamos por la mañana y él estaba allí. Nos dio lástima, lo pusimos aquí y le estamos dando de comer, pero el pobre está en esa situación. No camina porque sus dos patas delanteras están torcidas hacia atrás”, dijo.

Debido a su posición, el perro fue cariñosamente llamado “Foca”, ya que no puede moverse debido a que tiene las patas abiertas.

Los mecánicos de neumáticos lo mueven un par de veces durante el día, pero el perro eventualmente termina arrastrándose por el barro para interactuar con la única compañía animal disponible, un gato callejero que anda por el taller de neumáticos.

Según Lindomar Queiroz, el perro es dócil y necesita atención veterinaria, pero no puede pagarla.

“Por su apariencia, lo llamamos ‘Foca’. Estaba muy delgado cuando lo encontramos, pero ya está engordando porque le estamos dando de comer. Está sucio por la lluvia, pero no nos importa aquí”, declara Lindomar.

El abandono del perro causó repercusión en las redes sociales y Foca ya ha sido adoptado por una pareja de Porto Velho.

Los trabajadores de reparación de neumáticos que descubrieron al pitbull en el camino lo cuidaron durante casi tres semanas, proporcionándole comida y agua. Lo llamaron “Foca” al principio, pero Michele lo adoptó y le cambió permanentemente el nombre.

“Fue amor a primera vista. Su condición me conmovió mucho. Ya desamparado, se vuelve aún más porque es tan dócil y cariñoso. Me enamoré de él”, dijo su nueva madre. “Lo amo. No tengo palabras. Lo amo, mucho. El sentimiento de madre.”